top of page
Buscar

El amor propio como autoestima y como amor a sí mismo

  • Foto del escritor: AMOR
    AMOR
  • 10 ene 2018
  • 3 Min. de lectura

La autoestima no es más que el amor propio. Es la forma como tú te ves, lo que piensas de ti, lo que sientes hacia ti y cómo te tratas a ti mismo. Define el valor que tú te das. Es quererte, aceptarte y valorarte tal como eres, con tus cualidades y también con tus defectos, sabiendo que es imposible ser perfecto. Todo esto es muy importante porque de nuestra autoestima depende cómo nos vamos a comportar y cómo nos vamos a relacionar con los demás.

Los seres humanos necesitamos sentirnos amados, valorados y aceptados. ¿Saben cuál es el problema? Que pensamos que son las personas a nuestro alrededor las que se deben encargar de darnos todo esto. Siempre estamos esperando un cumplido, que nos digan que lo hicimos bien, que nos quieran, etc. El problema está en que esto no tiene ningún significado si nosotros mismos no nos queremos, no nos aceptamos y no nos valoramos. Somos nosotros los que debemos llenarnos de amor para no depender del reconocimiento de los demás.

¿Por qué digo que la raíz de los problemas de las personas está en que tienen una baja autoestima? Porque tener una baja autoestima quiere decir que en el mejor de los casos no te quieres a ti mismo, pero en el peor escenario ¡te odias! ¿Se dan cuenta de la gravedad de esto? Cuando tú odias a alguien o no te cae bien, simplemente te alejas de esa persona y decides ya no tener más contacto con ella. ¿Pero cómo haces para separarte de ti mismo? ¡Es imposible! Es entonces cuando las personas comienzan a hacerse daño ellas mismas.

Cuando nosotros nacemos somos perfectos y somos felices así como somos. Es a medida que crecemos y que vamos tomando conciencia de nuestro entorno que nos empezamos a formar una idea de cómo deberíamos de ser a través de los falsos conceptos que nos vende la sociedad sobre qué es ser bonito y feo, bueno y malo, inteligente y tonto.

Otro error común que cometemos es compararnos con los demás. Nos frustramos si vemos que alguien es más inteligente que nosotros, tiene más dinero que nosotros, tiene un mejor trabajo que nosotros, etc. Esto no debe ser así. En la vida siempre van a haber personas arriba y debajo de nosotros. Por esa razón es que con los únicos que debemos compararnos es con nosotros mismos y tratar de ser cada día mejores seres humanos. Debemos luchar por nuestros sueños y trabajar por alcanzarlos sin competir con los demás, porque cada uno tiene sueños y metas diferentes.

Tú tienes que saber que vales y que te mereces todo el amor posible por el solo hecho de ser tú. Si tú no te amas, no te aceptas y no te valoras, no puedes esperar que los demás lo hagan. Si alguien te dice que te quiere, que seas inteligente, que seas bueno, pero tú no lo crees… ¡te va a tener en sus manos! Como tú no lo crees, vas a necesitar que esa persona te lo esté diciendo todo el tiempo. Se va a volver como una droga para ti y a cambio de recibirla, vas a estar dispuesto a hacer lo que sea por quién te la da.

Una persona con una autoestima alta es una persona que se ama, que se acepta tal y como es, que sabe el valor que tiene como ser humano, que no se castiga por cometer un error, que se perdona, que se cuida y que se respeta. Este tipo de personas tienden a frustrarse muchísimo menos ya que saben que si algo no salió bien, la próxima vez que lo intenten va a salir mejor. No se dan por vencidos, porque tienen confianza, creen en sí mismos y son muy positivos y optimistas. Sólo si tenemos una autoestima alta podemos ser felices.

Por otro lado, como siempre les he dicho, no podemos dar lo que no tenemos. Si no tenemos amor, no podemos dar amor. Si no nos queremos a nosotros mismos, no podemos querer a los demás. Así como nos tratamos, vamos a tratar a los demás; como nos juzgamos, vamos a jugar; como nos criticamos, vamos a criticar; como nos ofendemos, vamos a ofender, etc.




 
 
 

Comentarios


© 2023 by The Beauty Room. Proudly created with Wix.com

bottom of page